Golpes de calor en perros

Golpes de calor en perros

Empieza el verano y con él llega un calor que ya conocemos en España. Como en otros países donde pasamos por lo general de 30º durante los meses de verano, es esencial que sepamos cuidar de nuestros perros: identificar golpes de calor, protegerlos adecuadamente, asegurarnos de que están bien hidratados, etc.

¿Cómo identificar un golpe de calor en el perro?

Como en casi todas las urgencias veterinarias, y sí, un golpe de calor lo es, identificarlo a tiempo y saber qué hacer puede salvar la vida a nuestro perro. Los perros no «sudan» como los humanos, no tienen glándulas sudoríparas, sino que en su lugar, jadean.

Un golpe de calor consiste básicamente en una elevación de la temperatura corporal que puede resultar muy peligrosa, e incluso mortal para nuestros perros. Suele producirse si la temperatura ronda los 42º.

¿Cuáles son los síntomas de un golpe de calor en perros?

  • Jadeo constante y más fuerte de lo habitual, puede parecer que el perro no puede respirar con facilidad
  • Vómito y/o saliva espesa
  • Las mucosas rosadas se ponen rojas o moradas, y si no actuamos a tiempo, azules y cianóticas
  • Convulsiones
  • Pérdida de conciencia

¿Cómo actuamos?

No es conveniente meterlo directamente en agua a no ser que nos lo indique así el veterinario, sino que es aconsejable mojarlo con agua poco a poco, y a continuación, vamos a intentar que beba agua fresca y limpia.

El siguiente paso sería acudir inmediatamente al veterinario.

Y lo más importante, siempre es mejor evitarlo.

¿Cómo evitar que mi perro tenga un golpe de calor?

La prevención es la mejor solución para los golpes de calor, así que a continuación te dejamos algunos consejos para que evites que tu perro pueda sufrirlo.

  • No lo dejes salir al exterior en las horas de máximo calor.
  • Procura que tenga siempre agua fresca.
  • El espacio en el que esté debe de estar adecuadamente refrigerado y protegido del calor excesivo.
  • Jamás lo dejes en el interior de un vehículo en las horas de calor.
  • Si tu perro está habitualmente en el exterior de la vivienda, asegúrate de que tiene suficiente sombra para resguardarse.
  • Evita los paseos a las horas de más calor.
  • Pon el aire acondicionado para refrescar las habitaciones cuando la ventilación o los ventiladores no sean suficiente.
  • Cuida sus patitas si por algún motivo ha salido en horas de mucho calor, las almohadillas pueden dañarse.

En general, se trata de usar el sentido común, ya que todos sabemos cómo tratar de resguardarnos del calor.

Por último, si tu perro pertenece a las razas de perros braquicéfalos , conocidos como chatos, deberás poner aún más cuidado por los problemas respiratorios que puedan tener.

Y recuerda, siempre primero, consulta a tu veterinario.

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